El método silábico es una propuesta de enseñanza para aprender a leer y a escribir la lengua española. Trata de superar el reto que plantea aprender con métodos literales como el que supone aprenderse las vocales y consonantes por separado, para luego aprender el sonido distinto que tiene esa misma vocal o consonante cuando se une con otra letra.
Fue desarrollado por los pedagogos Friedrich Gedike y Samuel Heinicke, que se centraron en la búsqueda de una técnica que permitiera a los niños aprender a leer de una forma mucho más rápida y eficaz. Con eso en mente, se les ocurrió la idea de utilizar sílabas y sus combinaciones para facilitar dicho proceso.
Pero veamos más detenidamente en qué consiste este método y cómo puede aplicarse en clase.
Qué es el método silábico
El método silábico es un método de lectoescritora que parte de la sílaba como la estructura más básica de una palabra. La lógica de este método se fundamenta en que, al pronunciarse una palabra en español no se hace pronunciando una letra aislada, sino que su sonido más básico es el que se pronuncia a través de una sílaba. Y es que es precisamente, a partir de las sílabas, como es más sencillo formar las palabras.
Podemos decir también que se trata de un sistema que combina las enseñanzas del fonema y la grafía en un mismo método, pero no lo hace de forma aislada, sino de manera conjunta.
El método silábico permite también a los niños reconocer y utilizar correctamente la ortografía que representa cada letra del alfabeto y hacer combinaciones con ellas de acuerdo con las reglas del idioma que estén aprendiendo, en un método silábico progresivo cuya dificultad aumentará a medida que los estudiantes asimilen los conocimientos.
Cómo se usa el método silábico en la lectoescritura
El método silábico se aplica de la siguiente manera:
- Se enseñan a los niños todas las letras junto con sus sonidos para lo que se puede hacer uso de imágenes que faciliten el proceso.
- Se enseña con especial énfasis las vocales y sus sonidos, y para este caso se pueden utilizar imágenes y pronunciar palabras que comiencen por vocales para que el niño se familiarice con este sonido.
- Al dominarse las vocales, se les debe enseñar las sílabas compuestas más sencillas del idioma como: ma, me, mi, mo, mu. Se hace esto con todas las combinaciones de sílabas sencillas, como pa, ta, ca, ba, etc.
- Ahora es el momento de enseñar sílabas más complejas para su pronunciación, como por ejemplo: bra, bre, bri, bro, bru. Así se realiza con otras parecidas como tra, cra pla, cla, etc.
- Una vez que los niños dominen la mayoría de sílabas se les enseñan entonces sílabas con estructura inversa, es decir, aquellas que comienzan con vocal, como por ejemplo: ar, er, ir, or, ur.
- Es la hora de enseñar las sílabas más complejas del idioma español, dentro de las que se encuentran las que forman diptongos como gua, güe, güi, o también pueden ser los triptongos como guau. Una forma sencilla de enseñarles triptongos es a través de la onomatopeya, generalmente con la pronunciación de sonidos de animales: guau, miau, etc.
Una vez que se completen todos los pasos anteriores, los estudiantes se sentirán preparados para comenzar a construir oraciones cada vez más amplias, y así hasta que formen textos completos. Sin embargo, en cualquier caso, el objetivo final del método silábico es conseguir que lean y comprendan un texto con facilidad, sin mayores complicaciones.
En definitiva, se trata de un método muy utilizado hoy en día puesto que se ha demostrado que funciona muy bien y permite a los niños comenzar a familiarizarse con diferentes grafías y sonidos. Como resultado los más pequeños terminan siendo capaces no solo de leer un texto, sino también de entenderlo, y les anima a aprender a escribir frases e incluso textos más o menos cortos por sí mismos.
Lo más importante, en cualquier caso, es que la dificultad de los ejercicios aumente poco a poco para dar a los niños la oportunidad de aprender a su propio ritmo, lo que puede dar resultados muy positivos. Además, y por si fuera poco, es un método muy fácil de integrar en el aula, así que… ¿a qué esperas para ponerlo en práctica? ¿O lo has hecho ya?